Carolina Toro, madre del soldado profesional Brayan Ruiz Toro, secuestrado por las disidencias de las Farc de alias Iván Mordisco, criticó al presidente Gustavo Petro y lo acusó de favorecer a los criminales por encima de quienes sirven en el Ejército.

El secuestro de militares por parte de las disidencias de las Farc sigue encendiendo las alarmas en el país. Uno de los casos que más conmueve es el de Brayan Ruiz Toro, soldado profesional que cayó en poder del grupo armado el pasado 26 de agosto bajo las órdenes de Iván Mordisco, jefe del autodenominado Estado Mayor Central (EMC).

En medio de la angustia, su madre, Carolina Toro, rompió el silencio con un mensaje desgarrador que envió a través de medios de comunicación. “Hijo mío, te amo tanto, te extraño, te extraña tu familia, te extrañan tus amigos, no creas, mi hijo, que estás solo por allá”, expresó entre lágrimas, reafirmando que lo espera de vuelta para reunirse nuevamente en familia.

Pero más allá del mensaje de apoyo, la mujer lanzó un duro cuestionamiento al presidente Gustavo Petro, asegurando que su Gobierno ha abandonado a los soldados: “Es la pura verdad, yo creo que es así, está más del lado de los corruptos que de su gente, que está trabajando para la nación, ya no le importa la vida de los seres humanos como los soldados”.

Carolina Toro incluso aseguró que, si su hijo logra regresar con vida, le pedirá que abandone el Ejército, pues considera que el Gobierno no les da garantías: “Para qué llaman a los muchachos a que presten el servicio si no van a estar del lado de ellos. Al presidente no le importa la vida de los soldados”.

El secuestro de Brayan Ruiz Toro se suma a otros cuatro militares y un auxiliar de Policía retenidos por las disidencias. El Ejército Nacional condenó el hecho, recordando que se trata de una grave violación a los derechos humanos y al derecho internacional humanitario. “Una vez más, con estos hechos se evidencia cómo estos terroristas transgreden los derechos humanos e infringen el derecho internacional humanitario, dado que la muerte de nuestro militar se produjo en total estado de indefensión”, señaló la institución en un comunicado reciente.

Por su parte, las disidencias de Mordisco han señalado que los uniformados permanecerán en su poder hasta que existan “condiciones” para su liberación, advirtiendo que esperan que el desenlace “no sea catastrófico”.

La situación en terreno se agrava con el aumento de asonadas campesinas contra la fuerza pública, las cuales, según el Ejército, ocurren bajo presión de las disidencias, que obligan a la comunidad a enfrentar a la tropa para impedir operaciones militares.

“Está más del lado de los corruptos que de su gente, que está trabajando para la nación. Ya no le importa la vida de los soldados”, afirmó Carolina Toro, madre del soldado secuestrado.