María Alejandra Benavides asegura que el ministro Ricardo Bonilla sabía del desvío de 92.000 millones ordenado desde la presidencia de Gustavo Petro en contratos para ganar votos en el Congreso.
Sandra Ortiz prendió el ventilador en la fiscalía, se destapa red de sobornos que salpica a altos funcionarios en las cupulas más altas de la presidencia de Gustavo Petro.