El asesinato del empresario de 74 años en Cali conmociona al país: la Fiscalía capturó a su propio hermano como sospechoso, mientras su hija reveló estremecedores detalles del desmembramiento y la incineración del cuerpo.

El país entero sigue consternado tras el giro macabro en el caso de Jorge Hernando Uribe Bejarano, el empresario de 74 años que desapareció durante once días y cuyo cuerpo sin vida fue hallado en abril en una vivienda de la vereda El Estero, corregimiento Navarro, zona rural de Cali. La Fiscalía capturó a su hermano, Juan Carlos Uribe Bejarano, como uno de los principales sospechosos de su asesinato, un hecho que ha despertado indignación por las similitudes con el recordado caso del estilista Mauricio Leal, asesinado por su propio hermano en 2021.

La investigación reveló que Juan Carlos, quien en redes sociales había pedido ayuda para encontrar a Jorge Hernando y luego confirmó públicamente la identidad de la víctima, podría haber participado en el atroz crimen. La captura se realizó el jueves 18 de septiembre, mientras ejercía como jefe de protocolo en la Biblioteca Departamental Jorge Garcés Borrero de Cali. La ironía del caso es brutal: el mismo hombre que lloraba a su hermano en Facebook, hoy enfrenta graves señalamientos por su muerte. “Con profundo dolor, queremos informarles que hemos recibido la confirmación de que el cuerpo sin vida encontrado el viernes pertenece a nuestro amado hermano, Jorge Hernando”, había escrito.

El testimonio de Alejandra Uribe, hija de la víctima, estremeció aún más la opinión pública. En entrevista con Caracol Radio relató los últimos momentos conocidos de su padre, quien salió de un restaurante a entregar unas cajas tras despedirse de su hermano. La última señal de su celular fue registrada a las 4:22 p. m. en Cachipay. Según Alejandra, en ese instante habría sido retenido y llevado al lugar donde terminó brutalmente asesinado. Con voz quebrada, describió el calvario que enfrentó su familia al recibir solo fragmentos óseos y cenizas: “A él lo desmembraron y después de que le cortaron todas sus partes, lo quemaron”. Una violencia que, según la hija, apunta a un acto de venganza premeditada.

El crimen de Jorge Hernando Uribe revive heridas profundas en esta familia caleña. Alejandra recordó que ocho años antes su madre también fue asesinada en una finca en Ginebra, Valle del Cauca. Aunque reconoce la posibilidad de una violencia recurrente, asegura no creer que exista una conexión directa entre ambos casos. Sin embargo, la tragedia marca un historial doloroso que deja huella en la memoria colectiva de la región.

El asesinato y posterior hallazgo del cuerpo del empresario conmocionan por la sevicia, la traición familiar y la crudeza del crimen. El hecho de que uno de los capturados sea su propio hermano amplifica el horror y recuerda que los episodios más brutales de violencia pueden gestarse en el seno mismo de una familia. La Fiscalía continúa adelantando las investigaciones para esclarecer los móviles detrás de este caso que ya ha sido calificado como uno de los más atroces de los últimos años en el Valle del Cauca y en Colombia.