Miguel Martínez fue expulsado por orden del presidente del Concejo, Pedro Gómez, en medio de una sesión ordinaria. El hecho ha generado controversia por el uso de la fuerza pública en un recinto democrático.

El Concejo Municipal de Santa Marta vivió un tenso momento durante una de sus sesiones ordinarias, cuando el concejal Miguel Martínez, conocido como ‘el Mono’, fue retirado del recinto por la Policía Nacional.

Martínez habría intentado intervenir en un tema que no estaba incluido en el orden del día, lo que generó la negativa del presidente del Concejo, Pedro Gómez, a cederle la palabra. Ante la insistencia del edil, su conducta fue interpretada como un intento de sabotaje a la sesión.

Fue entonces cuando Gómez hizo un llamado directo a los uniformados presentes para que procedieran a retirarlo, situación que quedó registrada por varios medios y generó un profundo debate en redes sociales.

“El uso de la fuerza en espacios deliberativos es una señal peligrosa para la democracia local”, expresó uno de los asistentes.

Sectores políticos y ciudadanía en redes se han dividido entre quienes consideran que se trató de un acto de indisciplina y boicot, y quienes lo ven como una clara violación a la libertad de expresión política.