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El gobernador de Norte de Santander, William Villamizar, expresó su preocupación por la grave situación que atraviesa esta área, donde los enfrentamientos entre el ELN y las disidencias de las Farc han dejado un saldo de más de 30 muertos y 20 heridos solo en los últimos días.
En un encuentro con el presidente Gustavo Petro, llevado a cabo en Tibú el pasado 17 de enero, Villamizar solicitó medidas urgentes para garantizar la seguridad y el bienestar de los habitantes. “Muchas familias están en riesgo de perder su vida”, afirmó el gobernador, quien describió un panorama crítico de confinamiento, desplazamiento forzado y falta de acceso a servicios básicos.
La región en cifras El Catatumbo concentra uno de los índices más altos de cultivos ilícitos en el país, con alrededor de 52 mil hectáreas de coca sembradas, lo que ha intensificado el conflicto por el control territorial entre los grupos armados. Desde el 16 de enero, se reportan enfrentamientos constantes, dejando a la población atrapada en medio de la violencia.
Propuestas del gobernador Entre las medidas planteadas por el mandatario departamental se encuentran:
Villamizar también pidió reanudar los diálogos con el ELN para buscar soluciones pacíficas al conflicto. Sin embargo, señaló que el Gobierno nacional enfrenta un desafío mayúsculo debido a la cancelación de las negociaciones con este grupo armado.
La población atrapada en el miedo Los habitantes de municipios como Tibú, Ocaña y Cúcuta se encuentran bajo un estado constante de zozobra. Comunidades enteras permanecen confinadas en sus hogares, mientras los líderes locales reportan la falta de recursos para atender a los desplazados. La situación también afecta a menores de edad, docentes y personas con discapacidad, quienes no han podido recibir la asistencia necesaria.
